El término
atropelladamente/
atrropelladamente ¿lleva ‘ll’ o ‘y’?¿Te sientes indeciso a la hora de escribir entre escribir
atropelladamente o tal vez el vocablo
atrropelladamente? No te agobies, podemos ayudarte. Son muchas las personas que tienen una inseguridad similar, y pasa porque en español tanto
atropelladamente como
atrropelladamente se pronuncian del mismo modo. A causa de esta similitud en su fonología, es habitual tener dudas sobre cuál es el modo correcto de escribir esta palabra, si como
atrropelladamente o lo que debes hacer es escribir
atropelladamente.
No queremos hacerte perder más tiempo en darte una respuesta, entre
atrropelladamente y
atropelladamente, la forma adecuada de escribir este vocablo es:
atropelladamente. A parte de brindarte esta respuesta que estabas buscando, nos agradará ofrecerte consideraciones que debes tener en cuenta en los momentos en que sientas dudas acerca de en qué ocasiones se escribe ‘ll’ y en qué casos se escribe ‘y’. De esta forma cada vez sentirás menos vacilación del tipo ‘¿Debería escribir
atropelladamente o quizá es
atrropelladamente?’
Consejo para escribir siempre correctamente atropelladamente
No te sientas dubitativo entre la palabra atropelladamente y el término atrropelladamente a la hora de escribir, puesto que solo existe una forma posible para escribir este término con corrección, y es: atropelladamente. El término atrropelladamente sencillamente no se encuentra en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.
Con el fin de que recuerdes mejor cómo es preciso escribir atropelladamente, creemos que te servirá de gran ayuda que tengas en cuenta su definición del diccionario:
Muy deprisa y de manera confusa. Sinónimos: precipitadamente , atolondradamente , confusamente , a tontas y a locas Antónimos: pausadamente , reflexivamente Ejemplo: «Salen; ella habla atropelladamente, pero logró entender: parece que el esposo está abajo, en la cafetería de la esquina, y ha sufrido un infarto» García Vega, Lorenzo (1978). Los años de Orígenes. Caracas: Monte Ávila Editores, 187.
